La lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales es un tema de gran relevancia en la Unión Europea, especialmente por su impacto en la liquidez y la sostenibilidad financiera de las empresas, en particular de las pequeñas y medianas empresas (pymes). La propuesta de Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo busca establecer medidas robustas para combatir este fenómeno y asegurar el funcionamiento adecuado del mercado interior, fomentando así la competitividad empresarial.
El informe sobre la propuesta de Reglamento destaca la necesidad de mejorar la disciplina de pago tanto de los poderes públicos como de las grandes empresas y las pymes. Se reconoce que la morosidad afecta negativamente a la previsibilidad de los flujos de tesorería, incrementando las necesidades de capital circulante y comprometiendo el acceso a financiación externa. Esto, a su vez, puede repercutir en el crecimiento y la competitividad, reduciendo la productividad y aumentando la probabilidad de despidos y quiebras.
La propuesta de Reglamento se presenta como una revisión y fortalecimiento de la legislación vigente, con el objetivo de evitar la morosidad y facilitar la puntualidad de los pagos. Se busca capacitar a las empresas y garantizar una mayor equidad en las operaciones comerciales. Además, se pretende proteger a las pymes contra los efectos negativos de la morosidad, estableciendo normas que promuevan el pago justo y puntual.
La iniciativa legislativa también contempla la creación de organismos de ejecución y la adopción de medidas preventivas y disuasorias más eficaces. Se enfatiza la importancia de garantizar que los poderes públicos cumplan con los plazos de pago establecidos y que los acreedores reciban automáticamente el interés legal y la compensación en caso de mora en el pago sin la necesidad de procedimientos de pagos vencidos.
En resumen, la propuesta de Reglamento representa un paso significativo hacia la creación de un entorno comercial más justo y equitativo en la Unión Europea. Al abordar la morosidad de manera efectiva, se espera no solo mejorar la salud financiera de las empresas sino también contribuir al crecimiento económico y la estabilidad del mercado interior.